Me tengo que poner una nueva etiqueta a la espalda. Yo creía que era un poco retrogamer pero de eso nada. Lo que estoy hecho es un auténtico necrogamer. Y es que me encantan las consolas muertas. Para mí tiene más emoción comprarme ahora mismo una Gamecube que una XBox 360. Rastrear tiendas de segunda mano (porque no soy nada de eBay), mercadillos, cajas de saldos... Una consola muerta o agonizante te da la oportunidad de conocer de antemano todo su catálogo y quedarte con lo mejor de lo mejor. Siempre que lo encuentres, claro está.

Y yo saldé una cuenta pendiente este fin de semana: una GP32 que encontré a precio de risa. La verdad es que casi me la como con patatas porque utiliza un sistema de tarjetas (SMC) que ya no se fabrica. Estuve un día entero pateándome mis tiendas habituales de cacharrada antigua y componentes jurásicos y nada... hasta que Filin, frikazo de pro, me dijo que tenía una tarjeta para satisfacer mis ansias jugables. ¡Gracias amigo!
Para quien no lo sepa la Gp32/GamePark es una consola koreana (¿coreana?, ¿koreana?, bah...) destinada sobre todo a la emulación y a aplicaciones realizadas por la gente. Su catálogo es bien escaso pero tiene dos juegos (All for her princess y Dungeon Guarder) bastante apetecibles. Y en cuanto a lo emulable, de lo que he probado de momento, SuperNintendo va bien (sin sonido), Megadrive va genial y la N.E.S va perfecta. ¡Es como tener una N.E.S portatil! Y yo con eso me doy con un canto en los dientes pero es que además, poder jugar al Super Pang o al Snow Bros en el metro es un lujazo. Revivir el Comix Zone, Streets of Rage 2 o el Ghouls and Ghost, y encima poder salvar partida en cualquier momento (lo que debería ser una filosofía en toda portatil) ha superado mis espectativas. De todas las portatiles que tengo ninguna me había dado un sustituto a esos juegos que he nombrado. Se me cae la baba con mi nuevo/viejo juguetito.
Tranquilos que no os he hecho leeros todo esto en vano, vamos a hablar de hackeos. En mi busqueda de alimento para la consola he encontrado cosas curiosas que ya que estamos saco a la palestra. Lo primero es esta versión de Final Fight (arcade) que nos permite jugar con Roxy/Poison, Andore y algunos jefes finales. Teneís videos de calidad dudosa por aquí. No me negaréis que es una gran idea.

El mundo de los hacks me apasiona. Muchos tuvimos como regalo en su día una NASA en vez de una N.E.S. Rompamos una lanza a favor de esas consolas piratas. Son una de las mejores falsificaciones existentes porque mejoran el original. Son iguales que una Nintendo y encima te traen (aparentemente) miles de juegos. Tengo que decir orgulloso que en mi NASA venía el Contra entre los 2000 y pico juegos que decía que traía. Aquí está la picardía del hack porque de esos 2000, 500 eran versiones del Super Mario Bros en las que añadían vidas o eras invulnerable. Esos hacks tienen escaso valor, más cuando veías que de esos 2000 juegos en verdad tenías 4 multiplicados 500 veces.
De esos hacks por lo tanto, nada. A mí los que me interesan son los que reprograman el juego, los que añaden personajes o permiten que juegues en tu consola a juegos inimaginables para ella. Famosas y chapuceras son algunas versiones de Sonic para N.E.S o Game Boy, por ejemplo. También tenemos a personajes queridos en el país de origen protagonizando versiones hackeadas ("localizadas" más bien porque salió a la venta de forma legal) de juegos existentes (El Chapulin Colorado vs Drácula, hack de Ghosthouse para Master System).

Las míticas traducciones charnegas (no os perdáis su obra cumbre: Tecmo Atleti) también entran en este terreno. Pero no siempre el hack es sinónimo de piratería, las compañías lo emplean muchas veces para reconstruir juegos o cambiar sus personajes. Durante mucho tiempo lamenté que Blue Shadow de N.E.S no tuviera su versión en Game Boy, hasta que hace poco me enteré de que el Ninja Gaiden de Game Boy se concibió para ser Blue Shadow. Simplemente Tecmo compró a Natsume el juego ya hecho y cambió el sprite del protagonista por el de Ryo Hayabusa. Un juego con el alma de otro.
Alguien excesivamente purista podría decir que la censura es otro modo de hackeo. No deja de ser una modificación del videojuego original tal y como fue concebido, aunque esa modificación nuevamente la lleve a cabo la empresa que hizo el juego. Ejemplos tenemos miles, casi siempre relativos a censura sexual por la mojigatería yanqui. En el vuelo de Japón a EE.UU. a las chicas les crecen las faldas y se les camufla el escote. Eso cuando no son sustituidas por maromos o robots. El sexo escuece pero la ideología también. En el Bionic Commando original se lucha contra nazis futuristas que han resucitado a Hitler. ¡Argumentazo! En la versión americana las referencias a los nazis desaparecieron y cambiaron las esvásticas en las banderas por unos pollos. Y si cambiamos la carátula del juego para que sea un poco más comunista... tampoco pasa nada.


Me voy a despedir por hoy con pirateo puro y duro. Hay dos series de videos en Youtube (Weird Pirate Games y Pirate Games Oddities) donde podeís encontrar muchos "quiero y no puedo". ¡King of Fighters '97 y Final Fight 3 en la N.E.S! También hay intentos gloriosos que parecen piratas y sorprendentemente son oficiales. ¿Sabíais que existe un Street Fighter II para Master System?
Os dejo con una adaptación brillante de Resident Evil.
!EXTRA, EXTRA¡
Semana de los marcianitos en casa de Roski. Insert Coin.
Para quien no lo sepa la Gp32/GamePark es una consola koreana (¿coreana?, ¿koreana?, bah...) destinada sobre todo a la emulación y a aplicaciones realizadas por la gente. Su catálogo es bien escaso pero tiene dos juegos (All for her princess y Dungeon Guarder) bastante apetecibles. Y en cuanto a lo emulable, de lo que he probado de momento, SuperNintendo va bien (sin sonido), Megadrive va genial y la N.E.S va perfecta. ¡Es como tener una N.E.S portatil! Y yo con eso me doy con un canto en los dientes pero es que además, poder jugar al Super Pang o al Snow Bros en el metro es un lujazo. Revivir el Comix Zone, Streets of Rage 2 o el Ghouls and Ghost, y encima poder salvar partida en cualquier momento (lo que debería ser una filosofía en toda portatil) ha superado mis espectativas. De todas las portatiles que tengo ninguna me había dado un sustituto a esos juegos que he nombrado. Se me cae la baba con mi nuevo/viejo juguetito.
Tranquilos que no os he hecho leeros todo esto en vano, vamos a hablar de hackeos. En mi busqueda de alimento para la consola he encontrado cosas curiosas que ya que estamos saco a la palestra. Lo primero es esta versión de Final Fight (arcade) que nos permite jugar con Roxy/Poison, Andore y algunos jefes finales. Teneís videos de calidad dudosa por aquí. No me negaréis que es una gran idea.
En los límites del fake
El mundo de los hacks me apasiona. Muchos tuvimos como regalo en su día una NASA en vez de una N.E.S. Rompamos una lanza a favor de esas consolas piratas. Son una de las mejores falsificaciones existentes porque mejoran el original. Son iguales que una Nintendo y encima te traen (aparentemente) miles de juegos. Tengo que decir orgulloso que en mi NASA venía el Contra entre los 2000 y pico juegos que decía que traía. Aquí está la picardía del hack porque de esos 2000, 500 eran versiones del Super Mario Bros en las que añadían vidas o eras invulnerable. Esos hacks tienen escaso valor, más cuando veías que de esos 2000 juegos en verdad tenías 4 multiplicados 500 veces.
De esos hacks por lo tanto, nada. A mí los que me interesan son los que reprograman el juego, los que añaden personajes o permiten que juegues en tu consola a juegos inimaginables para ella. Famosas y chapuceras son algunas versiones de Sonic para N.E.S o Game Boy, por ejemplo. También tenemos a personajes queridos en el país de origen protagonizando versiones hackeadas ("localizadas" más bien porque salió a la venta de forma legal) de juegos existentes (El Chapulin Colorado vs Drácula, hack de Ghosthouse para Master System).
Las míticas traducciones charnegas (no os perdáis su obra cumbre: Tecmo Atleti) también entran en este terreno. Pero no siempre el hack es sinónimo de piratería, las compañías lo emplean muchas veces para reconstruir juegos o cambiar sus personajes. Durante mucho tiempo lamenté que Blue Shadow de N.E.S no tuviera su versión en Game Boy, hasta que hace poco me enteré de que el Ninja Gaiden de Game Boy se concibió para ser Blue Shadow. Simplemente Tecmo compró a Natsume el juego ya hecho y cambió el sprite del protagonista por el de Ryo Hayabusa. Un juego con el alma de otro.
Alguien excesivamente purista podría decir que la censura es otro modo de hackeo. No deja de ser una modificación del videojuego original tal y como fue concebido, aunque esa modificación nuevamente la lleve a cabo la empresa que hizo el juego. Ejemplos tenemos miles, casi siempre relativos a censura sexual por la mojigatería yanqui. En el vuelo de Japón a EE.UU. a las chicas les crecen las faldas y se les camufla el escote. Eso cuando no son sustituidas por maromos o robots. El sexo escuece pero la ideología también. En el Bionic Commando original se lucha contra nazis futuristas que han resucitado a Hitler. ¡Argumentazo! En la versión americana las referencias a los nazis desaparecieron y cambiaron las esvásticas en las banderas por unos pollos. Y si cambiamos la carátula del juego para que sea un poco más comunista... tampoco pasa nada.
¿Pollos? ¿Generalissimo? Ay madre, que es una localización...
Me voy a despedir por hoy con pirateo puro y duro. Hay dos series de videos en Youtube (Weird Pirate Games y Pirate Games Oddities) donde podeís encontrar muchos "quiero y no puedo". ¡King of Fighters '97 y Final Fight 3 en la N.E.S! También hay intentos gloriosos que parecen piratas y sorprendentemente son oficiales. ¿Sabíais que existe un Street Fighter II para Master System?
Os dejo con una adaptación brillante de Resident Evil.
!EXTRA, EXTRA¡
Semana de los marcianitos en casa de Roski. Insert Coin.
Y luego estan los Dojin games, juegos hechos por aficionados que cogen versiones de personajes de sus juegos/series favoritas y los echan al cacerolo del juego que estan haciendo...
ResponderEliminarY también los Mugen, o como dar un motor de juego de lucha en 2D a millones de personas y que se dediquen a sacar versiones y versiones de un mismo juego sin sustancia...
Y las versiones no oficiales del King of Fighters, como el Crouching Tiger Hidden Dragon de placa NeoGeo (tambien conocido como POF), o el KOF 2004 "Special (nosenotequeespiraton) Edition" e incluso el "Metal Slug (masfalsoquelasmonedasdechocolate) 5" que también pertenecia a esa misma placa, cuando el M. Slug 5 es de Atomiswave...
En fin, un mundo curioso el de las variaciones de videojuegos oficiales ^^.
Vale. Ha vuelto usted a provocarme envidia. Pero, ¿cómo dice que se meten los emuladores en la consola esa de marras? Curiosidad, no más.
ResponderEliminarEn cuanto a esos hacks, todavía recuerdo con lágrimas en los dientes la primera vez que jugué al Doom... en un Spectrum! Lo imposible hecho realidad. Y es que lo que no hallan inventado los rusos para la máquina del señor Sinclair (hace un par de años, al menos, era el ordenador con más usurarios por allá los Urales...)
Arrrrrrgh!
ResponderEliminarle vuelvo a odiar otra vez. Mucho!
Ha sido oir poder jugar a clásicos de NES o SUPERNES en el autobus o el metro con la Gp32/GamePark y ponérseme los pelos como escarpias. ¿PS3? ¿Wii? Puaj.
ResponderEliminarLa culpa de todo la tiene la Spectrum. Una generación entera de informáticos retocando juegos.
ResponderEliminarY para desatre la versión "oficial" que hicieron para NES del MANIAC MANSION. Le quitaron todos los chistes escatológicos. ¡Cabrones!
Y gracias por el enlace.
No pase tiempo ni nada buscando el Street Fighter 2 para mi master system de crio.. y nunca lo encontre, es lo que tiene vivir en la periferia. Felicidades por tu nueva consola, debe ser un gustazo poder jugar en el metro al megaman, ya te digo.
ResponderEliminarSiempre me llamó bastante la atención la tal GP32.
ResponderEliminarY que suerte que la hayas encontrado... yo llevo buscando un mes por Jaén la DS y no hay manera. Al final me la voy a tener que comprar por Internet :(
Pd1: yo no tuve una Nasa pero tuve una Mx-Onda: le cabían los cartuchos de la Nes, traía uno de esos con cientos de juegos y además era de un color negro muy chulo.
Pd2: donde este un buen pollo que se quiten las escasticas. ¡Vivan las aves de corral!
Saludetes.
Yo en mi GP32X he vuelto a descubrir el gusto por los juegos retro, he vivido el mundo del hack y los ports de cerca y, la verdad, estoy encantado y muy contento. Este mundillo tan linuxiano se lo remiendo a todos.
ResponderEliminarCabrón, siempre te odié porque tu tenías el Contra y yo no. Que míticas eran nuestras Nintendos piratas...
ResponderEliminarSiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii la Nintendo Pirata, yo tenía una MxOnda. Con el Contra incluído, que duda cabe.
ResponderEliminarEse Contra estaba en un cartucho que tenía con 100 juegos de los cuales la mitad eran repes xD. Tenía versiones de Super Mario en las que la pantalla se distorsionaba estaba llena de agujeros donde hay suelo; con lo que para poder pasártelo tenías que saberte los mapas de memoria ¡todo un reto!. Versiones en las que nunca tenías más de una vida (da igual cuantas cogieras) etc.
Forfy, le odio. Disfrútela
Apunte innecesario: en el post del top de robots (me encanta por cierto que el primero sea megaman) se le olvidó poner que yo también hice uno :( Joooo
ResponderEliminarFelicidades colega tanto òr la nueva consola como por el articulo. Lo mejor de la Nasa el juego de Wresling con personajes de Muscleman
ResponderEliminar¡Gracias a todos por vuestro odio incondicional! No puedo contestaros uno a uno (ahora) pero he publicado ya el Top de los simios.
ResponderEliminarImágenes estúpidas, música y monos a go-go!
I´m lovin it,recuerdo con candor y estupor mi Nasa y su Mortal Kombat,lo de la consola esa debe ser lo mas...
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