25/3/10
El día más feliz de nuestras vidas
El día más feliz de nuestras vidas será este verano, cuando estrenen Scott Pilgrim vs. The World. Olvidad la manera en la que he venido hinchando el hype últimamente en Mad World. Me había quedado corto. Tenemos trailer y ahora puedo decir, puedo gritar más bien, que no somos dignos de ninguna de las maneras. Haced algo con vuestras puñeteras vidas de una vez porque no nos merecemos algo así ninguno de nosotros. Me voy a una esquina a llorar, no soporto que haya algo tan bueno, tan perfecto, tan bello en este mundo.
16/3/10
[odiorama]
Llamar noticias a lo que hace Antena 3 a diario es casi tan grave como llamar periódico al Que!. Propongo sustituir la denominación de ambos mamotretos por la de "anecdotarios diversos de chorradas y tal", definición mucho más certera a mi parecer. Se empieza desgastando los términos y después todo vale, cualquier juntaletras es ahora periodista sin necesidad de pisar una facultad e incluso hay tipos que se etiquetan como bloggers y tan contentos ellos con su gilipollez interna. Perdonad si vengo hoy con ganas de soltar bilis por aquí, pero hacía tiempo que no veía el noticiario de marras, y todo sigue igual, si cabe peor. Muy posiblemente no lo viera desde el verano; en verano si me gusta echarle un vistazo porque es, de tan casposo, entrañable, con sus señoras viejas quejándose del calor y los eventuales pezones furtivos de cualquier incauta que esté en la playa (y el omnipresente plano del termometro-en-Sevilla-con-cuarentaytantos-a-la-sombra). No es verano si no hay un plano del termómetro en Sevilla marcando cuarentaytantos en Antena 3 Noticias.
Hoy no me ha irritado nada expresamente. Debe ser efecto del calor extremo que dicho programa se haga accesible (es decir, que los extremos "es tan caposo [luego] es entrañable" se toquen) porque me he sentido idiota viéndolo, nada más. La verdad es que he cambiado de cadena para mis 5 minutos de odio controlado diarios. Veréis, hay quien le pega a un saco para descargar sus frustraciones, yo no tengo saco así que he tenido a bien sustituirlo por poner El hormiguero un rato y desear que a Pablo Motos [1] le reviente el ego en las narices. Se que, de alguna manera, desearlo con todas mis fuerzas tiene que producir, tarde o temprano, algún tipo de resultado. Se que entornando mis ojos como si fuera Carrie algún día lograré que quiten esta ponzoña de la parrilla, desintegrarla. Y no me vengáis con que simplemente hay que cambiar de canal o no ver el programa en cuestión que no me obliga nadie etcetera, esto tiene ramificaciones mucho más profundas que, resumiendo mucho, se traducen en una profunda reacción talibana basada en que no quiero vivir en un mundo donde existe El hormiguero y que no hay nada que me irrite más que la sintonía politonera del programa (joder). El buenrrollismo barato y la estupidez de Cuatro son señales inequívocas del inminente apocalipsis y, por tanto, objeto de interés y estudio de esta página. Venía yo a hablar de otra cosa pero todo se ha precipitado porque he encontrado esta imagen del gran Ruben Fernández que resume a la perfección lo anteriormente dicho:

[1] El hormiguero, Pablo Motos y su equipo, representan para el que esto escribe la sublimación del irritante estilo Cuatro. El "somos guays y lo sabemos" con el que están impregnados la mayoría de sus programas, sean Callejeros o 21 días. Programas cortados por el mismo patrón donde confrontan dos mundos: el idílico mundo Cuatro vs cualquier cosa que no sean ellos y, por tanto, no sea cool. El Universo Cuatro es fascinante en su endogamia, es la cadena que más abiertamente se ríe del espectador en su cara maquillando con aparentes buenas intenciones la basura que producen. Proyectando un perfil moderno, cosmopolita, donde tan sólo hay estupidez. Sólo desde la paradoja pueden entenderse propuestas como Hermano Mayor o lo de las madres adolescentes solteras, que están más cerca del porno (emocional) duro que de la labor social. Que Cuatro venda eso como contenido de interés social es un chiste tan estudiado en sus oficinas que no tiene gracia. A efectos de sinceridad, DEC es más honesto que El hormiguero. ¿Es por ello mejor programa? Depende del enfoque pero, al igual que no esperaría encontrar en la revista AR nada más que a Ana Rosa subida a su atalaya, no confiaría en un programa que trata sistemáticamente como estúpidos tanto a sus invitados como al espectador.
Hoy no me ha irritado nada expresamente. Debe ser efecto del calor extremo que dicho programa se haga accesible (es decir, que los extremos "es tan caposo [luego] es entrañable" se toquen) porque me he sentido idiota viéndolo, nada más. La verdad es que he cambiado de cadena para mis 5 minutos de odio controlado diarios. Veréis, hay quien le pega a un saco para descargar sus frustraciones, yo no tengo saco así que he tenido a bien sustituirlo por poner El hormiguero un rato y desear que a Pablo Motos [1] le reviente el ego en las narices. Se que, de alguna manera, desearlo con todas mis fuerzas tiene que producir, tarde o temprano, algún tipo de resultado. Se que entornando mis ojos como si fuera Carrie algún día lograré que quiten esta ponzoña de la parrilla, desintegrarla. Y no me vengáis con que simplemente hay que cambiar de canal o no ver el programa en cuestión que no me obliga nadie etcetera, esto tiene ramificaciones mucho más profundas que, resumiendo mucho, se traducen en una profunda reacción talibana basada en que no quiero vivir en un mundo donde existe El hormiguero y que no hay nada que me irrite más que la sintonía politonera del programa (joder). El buenrrollismo barato y la estupidez de Cuatro son señales inequívocas del inminente apocalipsis y, por tanto, objeto de interés y estudio de esta página. Venía yo a hablar de otra cosa pero todo se ha precipitado porque he encontrado esta imagen del gran Ruben Fernández que resume a la perfección lo anteriormente dicho:
[1] El hormiguero, Pablo Motos y su equipo, representan para el que esto escribe la sublimación del irritante estilo Cuatro. El "somos guays y lo sabemos" con el que están impregnados la mayoría de sus programas, sean Callejeros o 21 días. Programas cortados por el mismo patrón donde confrontan dos mundos: el idílico mundo Cuatro vs cualquier cosa que no sean ellos y, por tanto, no sea cool. El Universo Cuatro es fascinante en su endogamia, es la cadena que más abiertamente se ríe del espectador en su cara maquillando con aparentes buenas intenciones la basura que producen. Proyectando un perfil moderno, cosmopolita, donde tan sólo hay estupidez. Sólo desde la paradoja pueden entenderse propuestas como Hermano Mayor o lo de las madres adolescentes solteras, que están más cerca del porno (emocional) duro que de la labor social. Que Cuatro venda eso como contenido de interés social es un chiste tan estudiado en sus oficinas que no tiene gracia. A efectos de sinceridad, DEC es más honesto que El hormiguero. ¿Es por ello mejor programa? Depende del enfoque pero, al igual que no esperaría encontrar en la revista AR nada más que a Ana Rosa subida a su atalaya, no confiaría en un programa que trata sistemáticamente como estúpidos tanto a sus invitados como al espectador.
15/3/10
Arbeit für Alle (Trabajo para Todos)
Vi Arbeit für Alle hace unos años. No os digo en que festival, podría spoilear sin quererlo. Anoté el nombre en la libretita que llevo siempre encima, con una pequeña descripción no fuera a ser que encontrara soló ETT's alemanas o algo así. Busque en Google, nada. Ficha en IMDB, nada (ahora sí tiene). Emule, Torrents, etcetera, nada. Así que escribí su nombre como título de un post y lo guardé en borradores. De esto hace un par de años. De vez en cuando me acordaba de buscarlo y no lo habían vuelto a pasar ni en un triste certamen de cortos. Hasta más o menos la semana pasada que, inspeccionando borradores pendientes que tengo, me dio por buscarlo de nuevo. Ahora sí: el corto se ha presentado al Portable Film Festival que no tengo ni idea de lo que es, pero que nos permite verlo y descargarlo. Una recomendación: poneos cómodos. Reservad 10 minutos de vuestro tiempo. Dejadlo arrancar, fingid que os interesa lo que cuenta. A fin de cuentas no sólo contiene una Verdad Absoluta [mirad en los comentarios después de verlo] sino que soluciona él solito todo el tema del pensionazo y el paro juvenil. A este programa de empleo si me apuntaba yo, sí señor:
14/3/10
Fan, fan club
Es probable que en los siguientes días se deje caer por aquí Jordi Costa para echar un vistazo (¡y yo con estos pelos!) Es probable también que no, pero dejadme tener sueños húmedos con la posibilidad. Esta semana no he podido prodigarme mucho por aquí y es una pena porque se me ha podido ver en saraos de lo más interesantes: el estreno de Juan con miedo, nuevo cortometraje de Daniel Romero (a.k.a. Dani Lebowski) y la presentación de Los muertos de Jorge Carrión. Debería prometer aquí y ahora pequeñas reseñas, antes al menos de que ambos presenten algo nuevo. Me puede ahora mismo el momento ultrafan que viví el pasado jueves con el Sr. Costa, que realizó (junto a Isaac Rosa) la presentación del libro de Carrión. No seáis mal pensados: yo fui primero a Los muertos (con los deberes medio hechos puedo decir; estoy en la mitad de la primera temporada) pero no podía dejar pasar la ocasión de cargar con un ejemplar de Vida Mostrenca. Ejemplar que me ha costado un mundo conseguir, pero eso es otra historia.
Centrándonos en el momento ultrafan, no sé en que creeréis vosotros (religión y demás, entiéndase) pero yo creo, por encima de (casi) todas las cosas, en las enseñanzas de la Escuela Mostrenca. De hecho, la reciente lectura de Vida Mostrenca ha actuado de revulsivo para que volváis a tenerme juntando letras por aquí de nuevo. Por eso estaba allí, plantado con mi sobadísimo ejemplar, dispuesto a mendigar una firma al maestro, cuando la experiencia devino mutante. Pasé en un momento de tiaco barbudo de metro ochenta a colegiala quinceañera de los noventa ante la visión de un backstreetboy. Conseguí balbucear un par de frases sin sentido pero al menos pude cumplir uno de mis objetivos vitales que no era otro que conocer al autor de tan magna obra y transmitirle lo que me había supuesto su lectura. Algo así como estar dormido y que te despierten a palos, creo que le dije. ¡Viva el amostrencamiento!

Centrándonos en el momento ultrafan, no sé en que creeréis vosotros (religión y demás, entiéndase) pero yo creo, por encima de (casi) todas las cosas, en las enseñanzas de la Escuela Mostrenca. De hecho, la reciente lectura de Vida Mostrenca ha actuado de revulsivo para que volváis a tenerme juntando letras por aquí de nuevo. Por eso estaba allí, plantado con mi sobadísimo ejemplar, dispuesto a mendigar una firma al maestro, cuando la experiencia devino mutante. Pasé en un momento de tiaco barbudo de metro ochenta a colegiala quinceañera de los noventa ante la visión de un backstreetboy. Conseguí balbucear un par de frases sin sentido pero al menos pude cumplir uno de mis objetivos vitales que no era otro que conocer al autor de tan magna obra y transmitirle lo que me había supuesto su lectura. Algo así como estar dormido y que te despierten a palos, creo que le dije. ¡Viva el amostrencamiento!
8/3/10
The Clash at Demonhead
a) La cara de The Clash at Demonhead. Brie Larson como Envy Adams.
Superman es vegano, a todo esto.
Comprended mi obsesión con Scott Pilgrim. Estaba revolcándome en mi propia mierda en lo que ha sido un lunes para olvidar y, de alguna manera, ha salido de la nada a salvarme el culo (y no es la primera vez que lo hace). A lo que iba: ya deje caer el otro día que los canadienses Metric iban a encargarse de la banda sonora. Lo que no sabía en aquel momento es que iban a ser el alma de The Clash At Demonhead, el supergrupo de la traumatizante ex-novia de Scott, la pérfida Envy Adams. Podéis escuchar Black Sheep, primer adelanto de la BSO de la película, haciendoos fans de Metric en Facebook. En este enlace. Un momento... ¿Cómo un rancio AntiFacebook puede enterarse de estas cosas? Gracias al Sr. Sincriterio y a la Srta. Saricchiella. El uno por pasarme esta dosis de hype en un día gris. Sí muchacho: suena EXACTAMENTE como debería sonar. La otra por ejercer (una vez más) de nexo con el mundo real. Poder entrar en Facebook por la puerta de atrás, usufructuando la cuenta de otro, no tiene precio amigos. De eso sí que me hago fan yo.
b) El alma de Metric/The Clash at Demonhead. Emilie Haines.
P.d1: Tengo que retractarme del post Scott vs Migajas. Edgar Wright tiene su Flickr llenito de fotos del rodaje. Por cierto, ahora que lo preguntáis, sí. Es la mejor galería de fotos de la Historia de la Humanidad.
P.d2: Muy posiblemente el mundo se acabe mañana. Al menos el mío, tal y como lo conozco, ha dicho hasta aquí hemos llegado. Por si no sobrevivo al Nuevo Orden Mundial, ha sido un placer. La verdad es que no podéis quejaros: la semana pasada se me metió en la cabeza volver con fuerza y publicar cada día y lo cumplí. Toca bajar el ritmo...
7/3/10
interludio de dulce destrucción (vi)
Un poco de continuidad con esa especie de sección de la anterior etapa. O lo que es lo mismo: un poco de cacharrada para el domingo tarde. Sweet Destruction Interlude (canción venida a menos del excelente Funeral for Yesterday de Kittie / trastero en el que iba dejando enlaces a lo tonto y que use demasiado poco en la anterior etapa) allá vamos:
- Ayer pude echar unas partidas al Sonic & Sega All-Stars Racing. Olvidaos de ese quiero y no puedo que fue el regularcito Sega Superstars Tennis. La impresión, nuevamente, es que Sega mira de reojo los mashups que realiza Nintendo con sus personajes, pero esta vez no acusa tanto complejo de inferioridad. Si Sega Superstars Tennis resultaba decepcionante por no tomar como modelo el propio Virtua Tennis de la compañía, Sonic & Sega All-Stars Racing no vuelve a caer en el error de plagiar a la competencia en vez de mirarse un poco más el ombligo. De esta manera, el esqueleto del juego es Out Run 2006 y todos salimos ganando: derrapes imposibles, velocidad absurda y ese regustillo arcade que Sega nos regala de vez en cuando. ¿Un Mario Kart del universo Sega en cualquier caso? Evidentemente, pero de lo más digno. Recomendado sobre todo para los que más lo estaban esperando: la legión de putillas que sigue teniendo a Sega en su corazoncito. Eso sí, sigue molestándome el concepto de universo tan limitado que ofrece: ¿Dónde está Sketch Turner de Comix Zone? El fan extremo (ese mismo que ha reservado el juego para obtener en exclusiva a Ryo de Shenmue pilotando un montacargas) va a seguir echando en falta demasiadas cosas: como aquel rumor que situaba en el juego a Segata Sanshiro pilotando una Saturn....

- Un poquito de "retro". Sigo molesto con el hecho de que la saga Megaman se haya convertido en esto (resumen de anteriores capítulos en Mundo Alocado: a la mierda Capcom y su [estúpida, facilona] decisión de involucionar así al robotito azul). Lo mejor, nuevamente, es todo lo que acompaña al lanzamiento del juego y que encima me hace sentir mal: Capcom me arranca sonrisas complices y me hace pensar que , en el fondo, estaba deseando esto. ¡Haced un Megaman en condiciones para esta generación de consolas, coño!
- Poster(s) de la semana: Repo Men. ¿Pero esto no nos lo han contado ya en Repo! The Genetic Opera? A lo mejor es un remake encubierto al que le han quitado el alma y la música (con lo que el concepto de repo men cobraría mayor sentido). El set de carteles, no obstante, de lo más molón:

- ¿Pensáis que este Iron Man de papel es chulo?

Pues lo es mucho más todavía. ¿My Paper Heroes donde te habías metido hasta ahora? Operación alegrar un poquito mi mesa del tajo que falta le hace, allá voy.
- El disco que estoy escuchando ahora mismo:
- Así no puedo dejar de comprarme libros por la portada:

A rascarme un poco el bolsillo. Por lo que salta a la vista, y por la recomendación de Mr. Tarantino. Tenían que haberla dejado en la portada:
- Me he hecho una estantería en aNobii [http://www.anobii.com/mrforfy/books]. No quería yo por el tema de exponer mis miserias/carencias literarias al mundo y tal, pero he descubierto una utilidad grandísima: enfocar mis saqueos de forma selectiva en mis visitas a las mansiones de mis amigotes. ¡Tenga cuidado Maese Higronauta! Tiene demasiadas cosas que se me han antojado... Por otra parte es motivo de orgullo y satisfacción para un servidor comprobar que la mayor compatibilidad de gustos la obtengo con Juanma Sincriterio. No debo estar haciendo las cosas tan mal después de todo.
- Ayer pude echar unas partidas al Sonic & Sega All-Stars Racing. Olvidaos de ese quiero y no puedo que fue el regularcito Sega Superstars Tennis. La impresión, nuevamente, es que Sega mira de reojo los mashups que realiza Nintendo con sus personajes, pero esta vez no acusa tanto complejo de inferioridad. Si Sega Superstars Tennis resultaba decepcionante por no tomar como modelo el propio Virtua Tennis de la compañía, Sonic & Sega All-Stars Racing no vuelve a caer en el error de plagiar a la competencia en vez de mirarse un poco más el ombligo. De esta manera, el esqueleto del juego es Out Run 2006 y todos salimos ganando: derrapes imposibles, velocidad absurda y ese regustillo arcade que Sega nos regala de vez en cuando. ¿Un Mario Kart del universo Sega en cualquier caso? Evidentemente, pero de lo más digno. Recomendado sobre todo para los que más lo estaban esperando: la legión de putillas que sigue teniendo a Sega en su corazoncito. Eso sí, sigue molestándome el concepto de universo tan limitado que ofrece: ¿Dónde está Sketch Turner de Comix Zone? El fan extremo (ese mismo que ha reservado el juego para obtener en exclusiva a Ryo de Shenmue pilotando un montacargas) va a seguir echando en falta demasiadas cosas: como aquel rumor que situaba en el juego a Segata Sanshiro pilotando una Saturn....
(pese a todo el coche de Sonic me gusta. Pero sí, en el tutorial suelta algo así como "es un coche casi tan rápido como yo". Tsk...)
- Un poquito de "retro". Sigo molesto con el hecho de que la saga Megaman se haya convertido en esto (resumen de anteriores capítulos en Mundo Alocado: a la mierda Capcom y su [estúpida, facilona] decisión de involucionar así al robotito azul). Lo mejor, nuevamente, es todo lo que acompaña al lanzamiento del juego y que encima me hace sentir mal: Capcom me arranca sonrisas complices y me hace pensar que , en el fondo, estaba deseando esto. ¡Haced un Megaman en condiciones para esta generación de consolas, coño!
- Poster(s) de la semana: Repo Men. ¿Pero esto no nos lo han contado ya en Repo! The Genetic Opera? A lo mejor es un remake encubierto al que le han quitado el alma y la música (con lo que el concepto de repo men cobraría mayor sentido). El set de carteles, no obstante, de lo más molón:
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[Vía = IMP Awards]
- ¿Pensáis que este Iron Man de papel es chulo?
Pues lo es mucho más todavía. ¿My Paper Heroes donde te habías metido hasta ahora? Operación alegrar un poquito mi mesa del tajo que falta le hace, allá voy.
- El disco que estoy escuchando ahora mismo:
...y el que he descubierto de casualidad en Spotify esta semana. Tienen una canción (Missfit [je!]) en la que sustituyen el "A house in the middle of the street" de Madness por "My fist in the middle of your face". ¡Bravo!

- Así no puedo dejar de comprarme libros por la portada:
A rascarme un poco el bolsillo. Por lo que salta a la vista, y por la recomendación de Mr. Tarantino. Tenían que haberla dejado en la portada:
"Christa Faust es como la única morena en un mundo lleno de rubias".
[Vía = Cultura Impopular]
- Me he hecho una estantería en aNobii [http://www.anobii.com/mrforfy/books]. No quería yo por el tema de exponer mis miserias/carencias literarias al mundo y tal, pero he descubierto una utilidad grandísima: enfocar mis saqueos de forma selectiva en mis visitas a las mansiones de mis amigotes. ¡Tenga cuidado Maese Higronauta! Tiene demasiadas cosas que se me han antojado... Por otra parte es motivo de orgullo y satisfacción para un servidor comprobar que la mayor compatibilidad de gustos la obtengo con Juanma Sincriterio. No debo estar haciendo las cosas tan mal después de todo.
The Hikikomori Extreme Show
Uno sabe que está preparado para escribir en esto de los blogs cuando es sábado noche y en vez de estar ejerciendo de joven en el mundo exterior deja un enlace con propaganda militar norcoreana en su página:

No se pierdan (sí, a estas horas me da por hablarles de usted) el elegante blog donde he encontrado esto: ISO50 - The Blog of Scott Hansen (aquí pueden conocer un poco mas al tal Hansen, un tipo interesante). Toda la (fascinante) parafernalia norcoreana se la dedico al Sr. Roski que sé del pie que cojea y sabrá apreciarla.
En otro orden de cosas les iba a contar que tengo estantería en aNobii y que me he tirado media tarde para poner cuatro libros, pero en eso profundizo seguramente mañana. Esto de The Hikikomori Extreme Show tiene un poco de historia: Victor (MNRZ, ¿se acuerdan? nos íbamos a comer el mundo...) y un servidor maquinamos esbozar un reality tipo Curso del 63 a mayor gloria del arquetipo de Hikikomori Extremo, es decir, convencer a una panda de desgraciados del gremio Generación Ni-Ni de que la auténtica felicidad se consigue encerrándose en la habitación y mirando al techo. ¿Qué? Peor que Escuela de actores no iba a resultar...
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No se pierdan (sí, a estas horas me da por hablarles de usted) el elegante blog donde he encontrado esto: ISO50 - The Blog of Scott Hansen (aquí pueden conocer un poco mas al tal Hansen, un tipo interesante). Toda la (fascinante) parafernalia norcoreana se la dedico al Sr. Roski que sé del pie que cojea y sabrá apreciarla.
En otro orden de cosas les iba a contar que tengo estantería en aNobii y que me he tirado media tarde para poner cuatro libros, pero en eso profundizo seguramente mañana. Esto de The Hikikomori Extreme Show tiene un poco de historia: Victor (MNRZ, ¿se acuerdan? nos íbamos a comer el mundo...) y un servidor maquinamos esbozar un reality tipo Curso del 63 a mayor gloria del arquetipo de Hikikomori Extremo, es decir, convencer a una panda de desgraciados del gremio Generación Ni-Ni de que la auténtica felicidad se consigue encerrándose en la habitación y mirando al techo. ¿Qué? Peor que Escuela de actores no iba a resultar...
6/3/10
Exam
Uno de los instantes más inquietantes de The Game era a su vez punto de inflexión de la película y guiño empático a la mayoría de nosotros, espectadores y curritos losers de a pie. La milimétricamente calculada imposibilidad que envuelve a la historia queda aparcada momentáneamente en toda una secuencia: el proceso de selección. En ella, Nicolas Van Orton asiste, sin saberlo, a un ensayo de lo que va a ser su vida en las próximas semanas. Desconcertado y despojado de todo su poder se limita a realizar todo tipo de pruebas incomprensibles de las que desconoce los fines. Los fines serán la personalización de todo tipo de pruebas incomprensibles de las que, nuevamente, desconocerá los fines. Es difícil no sentirse identificado con el asqueroso ricachón si uno piensa en ese proceso de selección como en una hipotética entrevista de trabajo. Los mecanismos son idénticos. Van Orton a la salida de CRS tiene la misma cara de gilipollas y está tan desubicado en el mundo como tú y como yo al salir de una entrevista.
Giros argumentales, tortuosos lugares comunes, sensación de incertidumbre y angustia, cliffhangers, el entrevistador como serial killer, la dinámica de grupo convertida en un body count. Un proceso de selección tiene tantos puntos en común con el cine de terror que, vaya, asusta. Ambos géneros comparten el hecho de que sus códigos (morales, estéticos, formales) están tremendamente afianzados en el imaginario colectivo. La mayoría de películas de terror de cierto tipo son muy parecidas. Las entrevistas para cierto tipo de trabajos, también. Se busca lo que da miedo dependiendo de la época y la permisibilidad de los censores (lo politicamente correcto) para, finalmente, mostrarlo sin tapujos ("¿usted no irá a quedarse embarazada?"). Hablemos de subgéneros: las entrevistas para un trabajo basura son la Serie B del mundillo. Las ETT's poco menos que la Troma (sin su componente erótico-festivo). Tendencias y modas. ¿No os ha parecido algo agresiva la última entrevista que habéis hecho? Horror Porn.
El séptimo arte no ha explotado suficientemente estos mundos tan interconectados. Exam puede ser una excelente excepción que confirme la regla.
Giros argumentales, tortuosos lugares comunes, sensación de incertidumbre y angustia, cliffhangers, el entrevistador como serial killer, la dinámica de grupo convertida en un body count. Un proceso de selección tiene tantos puntos en común con el cine de terror que, vaya, asusta. Ambos géneros comparten el hecho de que sus códigos (morales, estéticos, formales) están tremendamente afianzados en el imaginario colectivo. La mayoría de películas de terror de cierto tipo son muy parecidas. Las entrevistas para cierto tipo de trabajos, también. Se busca lo que da miedo dependiendo de la época y la permisibilidad de los censores (lo politicamente correcto) para, finalmente, mostrarlo sin tapujos ("¿usted no irá a quedarse embarazada?"). Hablemos de subgéneros: las entrevistas para un trabajo basura son la Serie B del mundillo. Las ETT's poco menos que la Troma (sin su componente erótico-festivo). Tendencias y modas. ¿No os ha parecido algo agresiva la última entrevista que habéis hecho? Horror Porn.
El séptimo arte no ha explotado suficientemente estos mundos tan interconectados. Exam puede ser una excelente excepción que confirme la regla.
4/3/10
I'mma let you finish
Crease o no, me enteré del Kanyegate tras ver este video (minuto 1:13):
Sobra decir que recomiendo encarecidamente que veáis la serie entera de Rejected Mortal Kombat Fatalities. Nunca existirán suficientes parodias de los fatalities. Nunca. Volviendo al tema, lo que saqué en claro tras ahondar en el choque West-Swift es que aquí había materia de primera calidad para tonterías virales diversas. Y vaya que sí; el asunto acontenció hará unos 5 meses pero hay un tumblr que mantiene viva la llama: kanyegate.tumblr.com. La tontería que han puesto hoy es tan ÉPICA que sólo por eso he tenido que hacer este post ad-hoc. Entendedme, mirad la imagen y entendedme:

Sobra decir que recomiendo encarecidamente que veáis la serie entera de Rejected Mortal Kombat Fatalities. Nunca existirán suficientes parodias de los fatalities. Nunca. Volviendo al tema, lo que saqué en claro tras ahondar en el choque West-Swift es que aquí había materia de primera calidad para tonterías virales diversas. Y vaya que sí; el asunto acontenció hará unos 5 meses pero hay un tumblr que mantiene viva la llama: kanyegate.tumblr.com. La tontería que han puesto hoy es tan ÉPICA que sólo por eso he tenido que hacer este post ad-hoc. Entendedme, mirad la imagen y entendedme:
3/3/10
Scott vs. Migajas
Vale, lo se, lleva mes y pico por toda la red, pero echadle otro vistazo:

Wow. En serio. ¡WOW! La racanería promocional de la que ya he etiquetado como mejor película de 2010 me está crispando de veras. Quiero decir: así se hacen las cosas. Frente a la sobrexposición mediática, el minimalismo. Ni un triste teaser a estas alturas y las cuatro imágenes contadas que ya habéis visto mil veces. Es cierto que todavía queda mucho para el verano y en los próximos meses se disparará la mercadotecnia a lo loco, pero de momento Scott Pilgrim vs. the World me está poniendo los dientes muy largos con muy poquito. Con tan poquito que acostumbrado a bombardeos promocionales esta vez puedo decir que estoy me-mo-ri-zan-do cada dosis porque no se sabe cuando puede venir la siguiente. Cierro los ojos y puedo recrear el frame que precede a estas líneas. No soy el único con síndrome de Stendhal.
[Se hace raro. ¿Llegarán los banners invasivos, los correos promocionales, los mil y un videos por todos lados, las cuarenta versiones del mismo poster? La involución del marketing viral: lo más proactivo termina siendo la nada absoluta. El buscar las cosas a palo seco. De momento los cómics están saliendo por aquí como quien no quiere la cosa (¿referencias a la película?, ¿mande?). Y me he enterado, así como por casualidad, que un (resultón) grupo canadiense llamado Metric estará en la banda sonora. La pena son los pobres blogueros-mercenarios que se quedan sin su ración de imagen-promocional-nueva-cada-dos-horas para que puedan hacer su trabajo de actualizar 5 veces en una mañana el portal guay de contenidos chachis en el que colaboran. Cuanta injusticia.]
Wow. En serio. ¡WOW! La racanería promocional de la que ya he etiquetado como mejor película de 2010 me está crispando de veras. Quiero decir: así se hacen las cosas. Frente a la sobrexposición mediática, el minimalismo. Ni un triste teaser a estas alturas y las cuatro imágenes contadas que ya habéis visto mil veces. Es cierto que todavía queda mucho para el verano y en los próximos meses se disparará la mercadotecnia a lo loco, pero de momento Scott Pilgrim vs. the World me está poniendo los dientes muy largos con muy poquito. Con tan poquito que acostumbrado a bombardeos promocionales esta vez puedo decir que estoy me-mo-ri-zan-do cada dosis porque no se sabe cuando puede venir la siguiente. Cierro los ojos y puedo recrear el frame que precede a estas líneas. No soy el único con síndrome de Stendhal.
[Se hace raro. ¿Llegarán los banners invasivos, los correos promocionales, los mil y un videos por todos lados, las cuarenta versiones del mismo poster? La involución del marketing viral: lo más proactivo termina siendo la nada absoluta. El buscar las cosas a palo seco. De momento los cómics están saliendo por aquí como quien no quiere la cosa (¿referencias a la película?, ¿mande?). Y me he enterado, así como por casualidad, que un (resultón) grupo canadiense llamado Metric estará en la banda sonora. La pena son los pobres blogueros-mercenarios que se quedan sin su ración de imagen-promocional-nueva-cada-dos-horas para que puedan hacer su trabajo de actualizar 5 veces en una mañana el portal guay de contenidos chachis en el que colaboran. Cuanta injusticia.]
2/3/10
Connected
Podría caer en un bucle con Quiet Earth. Tranquilamente. Me imagino escopeta en mano, fusilando todo lo que publican. BANG. BANG. A la Homer promocionando la bolera. ¡Y tendría actualización diaria! No he hecho demasiado hincapie (todavía) en la página que más tiempo me está robando últimamente pero me permito los honores. Echad un vistazo y contemplad poco menos que el paraiso post-nuclear formato web. Seguramente diciendo sólo eso no cumpla con el cupo de loas necesario, tanto da, reincidiré inevitablemente en el tema más temprano que tarde. Aunque para evitar ser cansino recordad: cada vez que cierre un post con un sucinto "[Vía: Quiet Earth]", palabras mayores, gente, palabras mayores. ¡Y están buscando escritores de España! No soy digno, maldita sea... no soy digno...
Disgresión aparte hoy quería recomendaros un corto que descubrí en la citada página (y aprovecho que estoy arma en ristre para fijar otro objetivo a fusilar: las Ilusiones Cortas del Sr. Yume). Connected es una producción danesa que me atrajo irremediablemente tras contemplar su bellísimo poster [1]. Tras el visionado, su contexto, la impecable factura, el aroma a western y su capacidad de síntesis (fijaos en todo lo que es capaz de contar sin un sólo diálogo) han colmado mis expectativas. Disfrutadlo:

[1] Imprescindible Making of
Disgresión aparte hoy quería recomendaros un corto que descubrí en la citada página (y aprovecho que estoy arma en ristre para fijar otro objetivo a fusilar: las Ilusiones Cortas del Sr. Yume). Connected es una producción danesa que me atrajo irremediablemente tras contemplar su bellísimo poster [1]. Tras el visionado, su contexto, la impecable factura, el aroma a western y su capacidad de síntesis (fijaos en todo lo que es capaz de contar sin un sólo diálogo) han colmado mis expectativas. Disfrutadlo:
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[1] Imprescindible Making of
1/3/10
Where did all the love go? + El hombre que vivía cinco minutos en el futuro
Lo estaba intentando. De veras. Un nuevo diseño, ideas frescas, rescatar unos cuantos borradores. Una reentrada en condiciones. Un puñetazo a la apatía y demás memeces. Un mea culpa por lo bajinis mientras voy contestando los comentarios que se han quedado en el limbo de la moderación... y...
Tsk.
Afortunadamente los cuatro mostrencos que tenían a bien merodear por aquí ya saben de que pie cojeo. Al resto tendré que ganarmelos de nuevo con falsas promesas y maquillando como pueda la inconstancia. El enésimo intento de salir como sea del parón, sí, y encima os digo que es por envidia: hay unos tipejos sin criterio alguno que en cuanto se ponen a juntar letras me llevan los demonios. Malditos sean estos imberbes aventureros y sus conspiraciones diversas.
Lo dicho: estoy fuera del bunker de nuevo. Miradme, sentado a la intemperie, contemplando el hype estallar ante mis narices.

[P.d: Para que no se diga que vuelvo y empiezo a contar las mismas tonterías incomprensibles del fin-de-los-tiempos-y-demás, al menos os recomiendo un libro y rescato el que (atención) iba a ser el primer post del año, planeado para publicarse el mismito 1 de enero o algo así. Feliz año, clap, clap...]
"Había una vez un hombre que vivía cinco minutos en el futuro.
Cinco minutos y nada más que cinco minutos adelantado en relación al resto de los vientos y de los amaneceres, de las personas y de los animales de este planeta.
No es que semejante don le sirviera demasiado. No podía, por ejemplo, ganar fortunas en las carreras de caballos ni en la lotería. Tampoco hacerse rico iluminando profecías importantes. Cinco minutos era muy poco tiempo.
Apenas lo suficiente para saber que en cinco minutos iba a empezar a llover; que su insoportable primo golpearía la puerta y el tiempo justo para apagar todas las luces; que el asesino era éste y no aquel en esa novela policial o en esa película; que ella iba a llamar por teléfono para regalarle o mentirle aquello que esperaba desde hacía mucho más que cinco minutos.
Contar cinco veces hasta sesenta. Contar hasta trescientos. Contar despacio como si se contaran postes de electricidad en el camino, autos, latidos de corazón, golpes.
El día en que el hombre que vivía cinco minutos en el futuro salió a la calle gritando que el mundo había llegado a su fin nadie le creyó, claro; pero tampoco tuvieron demasiado tiempo para reírse del hombre que vivía cinco minutos en el futuro."
Por una parte: La velocidad de las cosas; no quería perder la oportunidad de recomendaros algo realmente bueno ahora que he decidido volver a pasarme por aquí. Quizá incluso a modo de disculpa por mis desplantes, la falta de educación, etcetera. Llevo, no se, menos de 1/3 leído y me tiro a la piscina: mi reto de este año será conseguir algo mejor que esto. Llego tarde a Fresán como a tantas otras cosas, pero me veo inmerso en un bucle que lo compensa con creces; en cuanto termine el libro volveré a empezarlo porque quiero armar la novela oculta que tiene en sus entrañas. Esa de la que, de momento, sólo tengo piezas desperdigadas que se me caen de las manos.
Por otra parte: La velocidad de mis cosas; 2010 no traerá grandes cambios a Mad World. El pulso seguirá inconstante; los signos vitales bajo mínimos. Pero aquí sigo, maldita sea, y la culpa es de los idiotas que (encima) lo estabais deseando. Que culpa tendré yo de nada.
Va por vosotros.
Tsk.
Afortunadamente los cuatro mostrencos que tenían a bien merodear por aquí ya saben de que pie cojeo. Al resto tendré que ganarmelos de nuevo con falsas promesas y maquillando como pueda la inconstancia. El enésimo intento de salir como sea del parón, sí, y encima os digo que es por envidia: hay unos tipejos sin criterio alguno que en cuanto se ponen a juntar letras me llevan los demonios. Malditos sean estos imberbes aventureros y sus conspiraciones diversas.
Lo dicho: estoy fuera del bunker de nuevo. Miradme, sentado a la intemperie, contemplando el hype estallar ante mis narices.
[P.d: Para que no se diga que vuelvo y empiezo a contar las mismas tonterías incomprensibles del fin-de-los-tiempos-y-demás, al menos os recomiendo un libro y rescato el que (atención) iba a ser el primer post del año, planeado para publicarse el mismito 1 de enero o algo así. Feliz año, clap, clap...]
"Había una vez un hombre que vivía cinco minutos en el futuro.
Cinco minutos y nada más que cinco minutos adelantado en relación al resto de los vientos y de los amaneceres, de las personas y de los animales de este planeta.
No es que semejante don le sirviera demasiado. No podía, por ejemplo, ganar fortunas en las carreras de caballos ni en la lotería. Tampoco hacerse rico iluminando profecías importantes. Cinco minutos era muy poco tiempo.
Apenas lo suficiente para saber que en cinco minutos iba a empezar a llover; que su insoportable primo golpearía la puerta y el tiempo justo para apagar todas las luces; que el asesino era éste y no aquel en esa novela policial o en esa película; que ella iba a llamar por teléfono para regalarle o mentirle aquello que esperaba desde hacía mucho más que cinco minutos.
Contar cinco veces hasta sesenta. Contar hasta trescientos. Contar despacio como si se contaran postes de electricidad en el camino, autos, latidos de corazón, golpes.
El día en que el hombre que vivía cinco minutos en el futuro salió a la calle gritando que el mundo había llegado a su fin nadie le creyó, claro; pero tampoco tuvieron demasiado tiempo para reírse del hombre que vivía cinco minutos en el futuro."
Apuntes para una teoría del lector
La velocidad de las cosas
Rodrigo Fresán
La velocidad de las cosas
Rodrigo Fresán
Por una parte: La velocidad de las cosas; no quería perder la oportunidad de recomendaros algo realmente bueno ahora que he decidido volver a pasarme por aquí. Quizá incluso a modo de disculpa por mis desplantes, la falta de educación, etcetera. Llevo, no se, menos de 1/3 leído y me tiro a la piscina: mi reto de este año será conseguir algo mejor que esto. Llego tarde a Fresán como a tantas otras cosas, pero me veo inmerso en un bucle que lo compensa con creces; en cuanto termine el libro volveré a empezarlo porque quiero armar la novela oculta que tiene en sus entrañas. Esa de la que, de momento, sólo tengo piezas desperdigadas que se me caen de las manos.
Por otra parte: La velocidad de mis cosas; 2010 no traerá grandes cambios a Mad World. El pulso seguirá inconstante; los signos vitales bajo mínimos. Pero aquí sigo, maldita sea, y la culpa es de los idiotas que (encima) lo estabais deseando. Que culpa tendré yo de nada.
Va por vosotros.
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